Podremos no estar totalmente de acuerdo con la creación del ministerio de Planeamiento-Agenda 2030-50, con el ministerio de las Aguas, el ministerio de los Pueblos Originarios o el Consejo Anti-Corrupción o siquiera sobre los ajustes en medio ambiente, desarrollo social y ciencias y tecnologías, sin embargo, en lo que DEBEMOS ESTAR DE ACUERDO es en la necesidad imperiosa y urgente de transformar la fallida y ya vencida estructura del Estado para dar soluciones a las demandas de las personas, las comunidades y del País, incluso del planeta.